La primera vez que oí hablar de la homeopatía, trabajaba en el mundo de la salud, pero en lo que conocemos más como alopatía.
Me llegó la información distorsionada y por opiniones nada contrastadas y de valor. La homeopatía para mí era, por tanto, bolitas de azúcar para que el paciente se sintiera mejor, obteniendo de estas un efecto placebo.
Se oían noticias de que solo los médicos pueden recetarla y solo se puede vender en farmacias. Algo no encajaba: si son solo bolitas de azúcar y sin ningún efecto terapéutico, ¿por qué no venderlas en herbolarios, centros de dietética, etc.? ¿Y por qué venderlas entonces en farmacias y a través de médicos?, fue algo que como un destello se me pasó por la cabeza, pero no le presté mucha atención.
Siempre me ha gustado investigar y no he dejado de estudiar y trabajar desde que tengo uso de razón, empezando por resolver el por qué, el cómo y el cuándo de todo. Así es como llegué a estudiar también filosofía.
Pero volviendo a la homeopatía, pasé años en mi vida rodeada de antiinflamatorios, antibióticos que pasaban por mis manos para probar con pacientes y conmigo misma.
Descubrí y tuve la suerte de conocer otros caminos, otras alternativas, que yo prefiero llamar “otras ayudas” a lo que, por cultura, no sé bien cómo llamar.
Este camino de otras medicinas alternativas a las que conocemos, las que tenemos a través de nuestro seguro social, etc., con medicamentos químicos y por supuesto aliviando el dolor y salvando muchas vidas.
Cuando oí hablar por primera vez a Koby Nehushtan, médico homeópata, sobre la homeopatía, fue como ¡perdona!, ¿por qué no he conocido antes este conocimiento?
Cuanto más hablaba, más me emocionaba. Era como despertar en mí algo auténtico, algo que tiene sentido. Koby habla de la homeopatía de forma dinámica, enseñando la materia médica de Hahnemann e instantáneamente poniendo un ejemplo real y vivo de un resultado de ese mismo remedio que está mostrando.
Podías ver de dónde procede la homeopatía, cómo se llegó a ella, las bases científicas, los años de estudio de médicos, trabajos de vidas enteras, de pruebas, de ensayos y, sobre todo, de resultados increíbles sin tener largas listas de efectos secundarios. Y lo mejor de todo, a muy bajo costo para el paciente.
Una cosa que me desconcertó es cuando se comienza a hablar de la homeopatía y el primer principio de “lo similar cura lo similar“, ampliamente hablado en otro artículo que escribí en este mismo blog de Devacharya.
Te desconcierta porque con mis conocimientos con una base alópata, donde los tratamientos son “lo contrario cura sobre lo que está ocurriendo”.
Y cuando habla sobre los miasmas, las tendencias, etc., es un mundo nuevo que investigar, antes que decir lo que muchos “ignorantes con título” que, como diría Unamuno, “fueron a la universidad, pero la universidad no entró en ellos”. Esos que dicen y hablan de lo que no saben, porque no lo han investigado, no lo han estudiado debidamente y sin embargo hacen largos tratados de comunicaciones, todas pagadas por laboratorios a los que no les interesa que algo tan barato funcione. Pero se atreven a jugar con la salud de las personas y con la integridad de profesionales que dan su vida y su trabajo, y les echan por tierra sus conocimientos alegando que “son bolitas de azúcar”.
DESARROLLATE PROFESIONALMENTE COMO HOMEOPATA
Destinado tanto a estudiantes como profesionales de la salud y del bienestar en todos sus ámbitos
A aquellos que afirman que la homeopatía son solo bolitas de azúcar, les diría que no hay carrera, licenciatura en este mundo que entre en su raciocinio.
Serán licenciados, pero no doctores. Para ser doctor hay que nacer, hay que querer, hay que estar sano de cuerpo, energía y mente.
Volviendo a por qué estudiar homeopatía Unicista, solo puedo contar mi experiencia, que es la mía. Y seguramente estarás leyendo esto y serás un homeópata y sabrás de lo que estoy hablando. También serás el médico o profesional de la salud que te has estado engañando todo este tiempo o simplemente no te interesa investigar en este tema.
Aunque dudo mucho de que estés leyendo hasta aquí y realmente no te esté causando curiosidad, aunque sea un poco, investigar sobre los orígenes de la homeopatía Unicista, de dónde viene, qué se ha conseguido, qué tienen de verdad mis palabras y quién es Koby Nehushtan.
Hay muchas personas, profesionales también de la salud, que no solo a través de la homeopatía trabajamos, pero sí es la homeopatía para nosotros clave en los tratamientos y en la evolución del ser humano. Entendemos que es ahí donde radica la salud con mayúsculas.
A aquellos que estén en duda de estudiar homeopatía, les invito a leer el blog de Devacharya, donde encontrarán varios artículos donde hablamos sobre ello.
Y si han decidido emprender este camino, elijan bien al maestro, elijan bien la fuente de conocimientos.
Rosa Manzano